El espacio común interior que formaliza la parcela se contempla como un espacio de uso cotidiano tanto en invierno como en verano, generando estancias a partir de los tratamientos de pavimentos y elementos de naturación que se incorporarán con el uso vecinal. Todos los tratamientos son de mínimo mantenimiento, introduciendo y complementando criterios de sensibilidad y sostenibilidad medio ambiental a estos espacios comunes. Se rompe con la idea de espacio interior "residual" donde se ubican las funciones menos dignas del uso doméstico. El edificio responde con la misma calidad de imagen al exterior y al patio interior, posibilitando una distribución de las viviendas adecuadas al criterio de la orientación solar y la optimización energética. Todas las viviendas son exteriores, puesto que el tratamiento de calidad del espacio público se ha incorporado al patio interior (desde la fachada hasta el pavimento) obteniendo espacios comunes de gran calidad, tanto vivideros (acceso a los portales, estancias, zona de juego...) como contemplativos desde el interior de las viviendas, consiguiendo integrar e incluso mejorar la relación exterior-patio interior. El programa funcional previsto contempla la realización de 33 viviendas, con el criterio de viviendas de Precio Máximo VPA Régimen General. El programa de viviendas se desarrolla a partir del acceso a los distintos portales incorporados en los patios interiores. Cada uno de los portales sirve a un número concreto de viviendas.